Su cuerpo será velado en la provincia San Cristóbal
El reciente fenecido sargento mayor de la Policía Nacional, Eddy Calcaño Castillo dejó en orfandad a dos niños, tras haber sido abatido por dos individuos que están prófugos en Baní, provincia Peravia.
Calcaño Castillo era padre de un joven de 15 años y otro que aún no cumple los dos años de edad.
El cuerpo del agente, quien falleció a causa de varios disparos, será expuesto en velatorio en San Cristóbal, ciudad donde este residía los últimos días de su vida, según se ha dado a conocer.
Todavía las primeras horas de esta noche, según información brindada a periodistas de este medio, los restos del sargento mayor permanecían en el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif), en Azua, donde se practica la experticia forense de rigor.
Prófugos
Una fuente cercana a la Policía en Baní, provincia Peravia, aseguró que avanzan las pesquisas para dar con el paradero de los señalados por la muerte del agente policial Eddy Calcaño Castillo, miembro de la Dirección de Investigaciones Criminales (Dicrim).
La fuente indicó que los asaltantes fueron identificados como Elvin Lugo Pérez (El Boti), quien conducía la motocicleta; y Henry Feliz (Mantequilla), quien habría sido la persona que disparó.